El calentamiento global empujó las temperaturas de 2020 a territorio récord, según datos recientes publicados por múltiples organizaciones científicas.
El Servicio de Cambio Climático Copernicus de la NASA y la Unión Europea dijo que 2020 comparte el denominador común de ser el año más caluroso registrado junto a 2016. Otras organizaciones, incluida la Asociación Meteorológica Mundial (OMM), la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica y la Oficina Meteorológica del Reino Unido, dijeron que 2020 estaba entre los tres años más cálidos jamás registrados.
Todas las organizaciones estuvieron de acuerdo en que las temperaturas de 2020 reflejan un patrón de temperaturas ascendentes generales.
“Los últimos siete años han sido los más cálidos registrados, tipificando la dramática y actual tendencia al calentamiento”, le dijo a la NASA el director del Instituto Goodard de Estudios Espaciales, Gavin Schmidt. “Si un año es récord o no, no es realmente tan importante; lo importante son las tendencias a largo plazo. Con estas tendencias, y a medida que aumenta el impacto humano en el clima, tenemos que esperar que se sigan batiendo récords”.
Las consecuencias del aumento de las temperaturas globales se sintieron en todo el mundo. En Australia, por ejemplo, a principios de 2020, se sintieron sus efectos mediante incendios forestales salvajes sin precedentes.
El New York Times informó que en Verkhoyansk, una ciudad de Siberia, las temperaturas alcanzaron los 100 grados Fahrenheit en junio, más de 30 grados por encima del promedio mensual.
También se registraron temperaturas significativamente más cálidas en el noreste y suroeste de los Estados Unidos. El calentamiento provocó sequías en casi la mitad del país, según el New York Times.
Los efectos del aumento de las temperaturas están causando preocupación en toda la comunidad internacional, especialmente desde que La Niña, la fase fría del ciclo El Niño-Oscilación Sur, comenzó en septiembre de 2020.
"El calor excepcional de 2020 se hizo sentir incluso a pesar de un evento de La Niña, que tiene un efecto de enfriamiento temporal", dijo el secretario general de la OMM, Petteri Taalas, a UN News.
La fase cálida, El Niño, ocurrió en 2016, lo que contribuyó a las altas temperaturas de ese año.
“Es notable que las temperaturas en 2020 estuvieran prácticamente a la par con 2016, cuando vimos uno de los eventos de calentamiento de El Niño más fuertes registrados”, dijo Taalas. "Esta es una clara indicación de que la señal global del cambio climático inducido por el hombre es ahora tan poderosa como la fuerza de la naturaleza".
El aumento de temperatura del año pasado ya se encuentra en el límite inferior de los acuerdos descritos en el Acuerdo Climático de París. Los científicos también advierten que 2021 podría ser otro año cálido.
"Nos dirigimos a un aumento catastrófico de la temperatura de 3 a 5 grados centígrados este siglo", dijo el secretario general de la ONU, António Guterres, a Noticias ONU. “Hacer las paces con la naturaleza es la tarea definitoria del siglo XXI. Debe ser la máxima prioridad para todos, en todas partes".