La mayoría de nosotros realizamos varias tareas sencillas de ahorro de agua todos los días.
Apagamos el grifo cuando nos lavamos los dientes. Tomamos duchas diarias en lugar de lujosos baños de burbujas. Incluso mantenemos el agua fría en el refrigerador en lugar de usar el modo de agua fría en el grifo.
La mayoría hemos aprendido sobre estas técnicas de conservación del agua desde la escuela primaria. Y si bien podemos considerarnos consumidores de agua responsables, todavía hay muchas formas ocultas en las que desperdiciamos o malgastamos el agua todos los días. A menudo sin darnos cuenta.
El desperdicio de agua y su uso indebido contribuyen a la escasez de agua y al acceso desigual de millones de personas en todo el mundo, especialmente las que viven en regiones afectadas por la pobreza, los conflictos y las catástrofes relacionadas con el cambio climático. En todo el mundo, aproximadamente 2.100 millones de personas carecen de acceso confiable al agua potable, según la Organización Mundial de la Salud.
Es por eso que Global Citizen realiza campañas para garantizar el acceso universal al agua limpia. Puedes ayudar y tomar medidas responsables sobre este tema aquí.
También puedes considerar cinco formas comunes en las que indirectamente consumimos agua a través de nuestras compras o cómo usamos la energía.
1 // Comprar agua embotellada
Cuando se trata de agua embotellada, el impacto de los envases de plástico en el medio ambiente es lo que más llama nuestra atención.
Pero el origen del agua en sí es un problema masivo que afecta a algunas de las regiones más afectadas por la sequía en los Estados Unidos y el mundo.
Al menos el 45% del agua embotellada que se vende en los EE. UU. es solo agua corriente filtrada, es decir, a menudo es la misma agua que sale del grifo en tu casa. Y mientras comunidades como Michigan lidian con la crisis de agua a nivel municipal, impulsadas por la reducción de costos y el descuido del gobierno, los embotelladores han intentado establecer una tienda en el estado para vender el agua a los residentes.
Otro ejemplo importante es el de Ciudad del Cabo, ciudad que podría quedarse totalmente sin agua y donde ya hay organizaciones como la Coalición por la Crisis del Agua (Water Crisis Coalition) manifestándose contra el impacto del agua embotellada. Coca Cola y otros conglomerados han incluso absorbido agua del embalse de la ciudad durante una sequía devastadora.
"Esto equivale a un abuso en situación de crisis en lugar de contribuir positivamente y tomar medidas que hagan que el agua dure un poco más", dijo a Quartz Africa Shaheed Mohamed, miembro de la Coalición para la Crisis del Agua. "El agua a la que ellos tienen acceso debería estar disponible para aquellas comunidades donde el acceso al agua se ha limitado injustamente".
2 // Dejar las luces encendidas
Encender las luces o subir el termostato pueden parecer formas sorprendentes de derrochar agua. Pero si tu calefacción o electricidad provienen del gas natural, estás contribuyendo indirectamente al desperdicio de agua y al mal uso de este recurso.
Esto se debe a que el fracking de gas natural consume casi 10 millones de galones de agua por pozo y agota la agricultura y las fuentes de agua potable en regiones afectadas por la sequía como Texas y otras partes del suroeste, según un estudio del Servicio Geológico de los EE. UU.
Fracking - el término común que se usa para denominar el proceso de fracturación hidráulica - libera enormes cantidades de agua, arena y productos químicos en el suelo para liberar gas metano, que luego es capturado y utilizado como combustible fósil.
Y aunque una fracción del agua de fracking se recicla, la gran mayoría se elimina del ciclo del agua y, a menudo, se sumerge bajo tierra porque está muy contaminada con las sustancias tóxicas utilizadas para frack, según informa Scientific American.
3 // Ignorar el pedido de ayuda de nuestro grifo averiado
Puede parecer solo un pequeño charco en el gabinete debajo del fregadero de la cocina o en el piso de la ducha, pero toda esa agua se acumula.
De hecho, la cantidad de agua que se pierde por el goteo de grifos y tuberías con fugas podría llenar 40 millones de piscinas. O 24 mil millones de bañeras. O toda la extensión del lago Okeechobee, el cuerpo de agua más grande de Florida.
En 2015, la Agencia de Protección Ambiental publicó un informe como parte de Fix A Leak Week que detallaba que en total son mil millones de galones de agua los que gotean a través de grifos defectuosos, tuberías perforadas o inodoros que dejan de funcionar constantemente cada año en los hogares de Estados Unidos.
¿La solución? Toma una llave inglesa y aprieta el grifo. O llama a un plomero.
4 // Iniciar sesión en Facebook
Sí. De verdad.
En el proceso de preservar y potenciar la tecnología de Internet, los centros de datos masivos generan una gran cantidad de calor. Por lo tanto, para mantener las instalaciones frescas y evitar que los servidores se frenen, los centros de datos dependen del agua, en gran parte.
Un solo centro de datos operado por la Administración de Seguridad Nacional en Utah utiliza 1.7 millones de galones de agua al día para mantenerse fresco.
En 2016, Facebook consumió aproximadamente 315 millones de galones de agua, y aproximadamente tres cuartas partes de ese total se desvió a sus centros de datos. Mientras tanto, las operaciones de minería de criptomonedas, como Bitcoin, constituyen la próxima frontera para el enfriamiento de los centros de datos y amenazan con drenar los suministros de agua.
Algunas empresas ya han comenzado a implementar soluciones de enfriamiento que requieren menos agua, aunque esto aún está lejos de convertirse en la norma.
5 // Comprar ropa nueva
El tinte utilizado para colorear nuestra ropa requiere una gran cantidad de agua, lo que significa que cada camiseta nueva que compras tiene un gran efecto en el suministro de agua.
Según The Guardian, las instalaciones en las que se tiñe la ropa en India y China son una carga enorme para los suministros locales de agua por dos motivos. Primero, usan una gran cantidad de agua de ríos, lagos y arroyos y, además, vuelcan las aguas residuales contaminadas a esas fuentes de agua.
Solo un par de jeans puede requerir hasta 8,000 galones de agua para ser producido, desde el campo de algodón hasta el proceso de teñido.
Algunas compañías, como Patagonia, han comenzado a utilizar tintes libres de agua. Patagonia utiliza la mitad del consumo promedio de agua en sus casas de tintes e incluso ha experimentado con la caca de insectos como fuente de colorante ecológico.
"La industria textil es una de las industrias químicamente más intensivas en la tierra, solo superada por la agricultura. Es el mayor contaminante del mundo de agua dulce, que es cada vez más escasa", escribió Yvon Chouinard, fundador de Patagonia, en su libro The Responsible Company. "El Banco Mundial estima que casi el 20 por ciento de la contaminación industrial del agua proviene del teñido y tratamiento de textiles".