Los océanos del mundo se están volviendo irreconocibles rápidamente debido a que los impactos de la actividad humana destruyen la vida marina, según un informe publicado en la revista Current Biology.
De hecho, solo el 13% de los océanos del mundo tienen ecosistemas marinos intactos, mientras que el resto ha sido saqueado y degradado.
La mayoría del espacio oceánico saludable, mientras tanto, existe en alta mar, fuera de las áreas marinas protegidas nacionales. Como resultado, estas secciones son vulnerables a ser explotadas, por lo que la creación de tratados internacionales para proteger los océanos es aún más urgente, según publicó The Guardian. Las Naciones Unidas encabezan actualmente un esfuerzo para proteger de manera integral la zona de alta mar.
"Nos sorprendió lo poco que queda de naturaleza marina", dijo Kendall Jones, autor principal del informe, a The Guardian. "El océano es inmenso y cubre más del 70% de nuestro planeta, pero hemos logrado afectar significativamente a casi todo este vasto ecosistema".
Los océanos están siendo dañados de diversas maneras.
El cambio climático está causando el aumento de las temperaturas oceánicas globales, cambiando la forma en que migran las especies de peces, afectando la forma en que se reproducen los animales, causando la muerte de los arrecifes de coral y liberando patógenos peligrosos.
Los océanos del mundo también absorben gran parte del exceso de dióxido de carbono producido por la actividad humana, lo que hace que las aguas se vuelvan más ácidas e inhóspitaspara la vida marina.
La industria pesquera mundial está sobreexplotando las poblaciones de peces y matando varias especies que no necesariamente son buscadas para su captura, como delfines, tiburones y ballenas.
Los autores del informe sostienen que los países deben dejar de subsidiar la pesca en alta mar, que cuesta $ 4 mil millones anuales, para permitir que las criaturas marinas florezcan en estas áreas.
El informe también insta a los países a proteger el Ártico, que rápidamente está siendo accesible para los buques pesqueros. Actualmente se encuentra en curso una propuesta para crear los santuarios marinos más grandes del mundo en el Ártico.
La contaminación industrial de granjas, fábricas y embarcaciones llena entornos marinos con sustancias químicas nocivas, mientras que la contaminación plástica está convirtiendo grandes secciones de los océanos en áreas repletas de obstáculos peligrosos, señala el informe.
La ONU recomienda que los países amplíen las áreas marinas protegidas y frenen la liberación de plásticos y otras formas de contaminación en las aguas.
En los últimos años, la lucha contra la contaminación plástica se ha convertido en un punto de reunión para los ambientalistas y más de 60 países han tomado medidas para reducir la producción de plástico.
Sin embargo, revertir el declive general de los océanos será un desafío, según el informe.
Más allá de establecer tratados internacionales, regular la industria pesquera y reducir la contaminación, los países deben mitigar el cambio climático, que puede representar el mayor riesgo a largo plazo.
No hacerlo, según los autores, podría ser catastrófico.
"Más allá de solo valorar la naturaleza por el bien de la naturaleza, seguir teniendo estos grandes paisajes marinos intactos que funcionan de una manera en la que siempre lo han hecho es realmente importante para la Tierra", dijo Jones a The Guardian. Mantienen los procesos ecológicos tal cual funcionan el clima y el sistema de la Tierra. Sin ellos, se podrían comenzar a ver grandes efectos en cadena con consecuencias drásticas e imprevistas".