Según informó recientemente The Guardian, Facebook y YouTube están dirigiendo a los usuarios a información anti-vacunas errónea, aunque ambos sitios web digan que están trabajando para prevenir la propagación de este tipo de información falsa.
Según los investigadores, ambos sitios web han luchado durante mucho tiempo contra la desinformación, las "noticias falsas" y el fanatismo, pero el problema con el movimiento anti-vacunas es que pone en riesgo la vida de las personas.
El movimiento anti-vacunas se basa en la idea de que las vacunas causan autismo y trastornos cerebrales, aunque no hay evidencia científica que respalde esa afirmación.
En realidad, los datos estadísticos estiman que gracias a las vacunas se evitarían más de 21 millones de hospitalizaciones y 732,000 muertes entre los niños nacidos en los últimos 20 años. Las investigaciones muestran que aproximadamente 1,4 millones de niños menores de 5 años en el mundo aún mueren cada año debido a la falta de acceso a las vacunas.
Cuando los padres no vacunan a sus hijos, también perjudican a la población que los rodea, al reducir la llamada "inmunidad de rebaño", que es la que impide los brotes.
La información anti vacunación es especialmente dañina en este momento. Recientemente el estado de Washington declaró el estado de emergencia debido a un brote de sarampión que continúa propagándose.
Nita Bharti, profesora asistente de biología en la Universidad Estatal de Pennsylvania, dijo a The Daily Beast que solo hay una manera de prevenir que la enfermedad viral infecciosa se propague.
"No hay nada en nuestra caja de herramientas que sea mejor que las vacunas", dijo.
Para ver cómo los usuarios se cruzan con la información de vacunación, The Guardian creó dos nuevas cuentas de Facebook y YouTube que no se verían afectadas por búsquedas anteriores. Descubrieron que las búsquedas de "vacuna" arrojaron información falsa contra las vacunas, lo que obligó a los usuarios a buscar términos como "movimiento de verdad sobre las vacunas" y "movimiento de resistencia a las vacunas".
Técnicamente, las publicaciones contra la vacunación no violan las reglas de contenido de Facebook. Pero Facebook sí permite que los grupos anti-vacunas se anuncien en esta plataforma de redes sociales.
"Tenemos más que hacer y continuaremos los esfuerzos para conectar a las personas con información educativa sobre temas importantes como la salud", dijo la portavoz de Facebook, Andrea Vallone, en un comunicado.
Un portavoz de YouTube le dijo a The Guardian que su sitio web intenta monitorear los videos contra la vacunación, categorizándolos bajo "contenido que podría informar mal a los usuarios de manera dañina".
El internet es un caldo de cultivo para el material anti-vacunación. La Royal Society for Public Health realizó un estudio y descubrió que la mitad de los padres con niños pequeños estaban expuestos a información errónea sobre las vacunas en las redes sociales.
Si las plataformas de redes sociales no actúan rápidamente para monitorear los mensajes de vacunación, las consecuencias podrían ser graves. En enero, la Organización Mundial de la Salud (OMS) publicó una lista de las 10 mayores amenazas mundiales para la salud. En el informe, la OMS advirtió que el movimiento anti-vacunas podría paralizar, e incluso sabotear, el progreso general que el mundo ha hecho para reducir los casos de enfermedades prevenibles.