Es posible que la selva tropical amazónica se haya salvado de un duro golpe, al menos por ahora.
Una corte federal en Brasil bloqueó la reciente decisión del presidente Michel Temer de abrir la selva tropical amazónica a la minería comercial, una victoria para los ambientalistas que luchan para proteger la reserva natural.
Temer anunció la semana pasada que abriría una parte de 17.800 millas cuadradas del Amazonas a la minería de oro y otros minerales. Luego, el gobierno anunció que no permitirían la minería en áreas de conservación e indígenas, pero que la permitirían en otras partes de la selva tropical.
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Maurício Voivodic, líder del organismo de conservación WWF en Brasil, dijo que la minería en el área llevaría a la “explosión demográfica, la deforestación, la destrucción de recursos acuáticos, la pérdida de biodiversidad y la creación de un conflicto de tierras."
La WWF advirtió sobre una potencial “fiebre del oro” que ocasionaría “daños irreversibles,” de acuerdo con la BBC.
La reserva Renca, la parte del Amazonas que se abriría a la minería, es más grande que la nación de Dinamarca. Cerca de un tercio sería vulnerable a la minería comercial con el decreto de Temer, según la BBC.
Pero una corte federal en Brasilia dijo hoy que suspendería cualquier acción relacionada con la decisión de Temer. El juez Rolando Spanholo dijo que Temer tomó la decisión sin consultar al Congreso, lo cual fue una violación de la constitución, de acuerdo con Deutsche Welle.
También dijo que la decisión podría “poner en riesgo la protección ambiental (de Renca) y la protección de las comunidades indígenas locales.”
El fiscal general de Brasil dijo que apelará la decisión, según Deutsche Welle.
La lucha por el futuro del Amazonas se ha intensificado de otras maneras. Recientemente, Noruega amenazó con sacar más de $100 millones del país si la deforestación escala este año.