Una nueva vacuna podría prevenir el cáncer de mama y estar disponible dentro de los próximos 10 años, según una nueva investigación de la Clínica Mayo en Jacksonville, Florida.
"La vacuna tiene una combinación de antígenos que están diseñados para prevenir el cáncer de mama, pero que también tienen el potencial de prevenir otros tipos de cáncer", le dijo a Global Citizen el Dr. Keith Knutson, investigador de la Clínica Mayo. "Genera anticuerpos y células T que son específicas para el cáncer de mama. Una vez que generamos esa inmunidad, puede durar largos períodos de tiempo y circular en la sangre. Incluso en algunos casos, puede durar años".
Los investigadores ya han creado vacunas que protegerían contra las recurrencias del cáncer de mama triple negativo y el cáncer de mama HER2 positivo, y están trabajando en otra contra el carcinoma ductal in situ (DCIS): tres tipos diferentes de cáncer de mama.
Las vacunas funcionan al provocar una respuesta del sistema inmune del cuerpo y alentarlo a atacar y matar las células cancerosas.
Knutson es el investigador principal de una subvención federal de $13 millones para probar la vacuna inicial que se desarrolló para prevenir la recurrencia del cáncer de mama triple negativo, pero desde entonces los investigadores han analizado cómo podrían prevenir el cáncer por completo.
Para hacer esto, están trabajando en conjunto con la National Breast Cancer Coalition.
Las tres vacunas que buscan prevenir las recurrencias son algo más fáciles de abordar, ya que los investigadores saben qué tipo de cáncer buscan prevenir.
La nueva vacuna evitaría el cáncer de mama en general y, por lo tanto, requerirá un enfoque diferente.
"Cuando intentamos prevenir el cáncer de mama, no sabemos qué tipo de cáncer de seno van a contraer, porque hay varios tipos diferentes", dijo Knutson. "Por lo que tenemos que trabajar en una vacuna más expansiva".
Los ensayos clínicos de fase 1 en humanos para la vacuna de prevención de cáncer comenzarán a probarse en 2020, para mayor seguridad.
Las otras vacunas ya se encuentran en la fase 2, en la que los investigadores están evaluando su impacto en las personas que han tenido cáncer anteriormente, pero que actualmente están libres de la enfermedad. Esta fase también educará al equipo sobre cómo podrían necesitar diseñar sus ensayos de fase 3.
El proceso de certificación de la vacuna es largo y estos planes aún se encuentran en sus primeras etapas, pero Knutson tiene esperanzas.
"Acabamos de terminar un estudio de una nueva vacuna HER2 y ese estudio nos mostró que más del 90% de las personas respondieron bien", dijo. "Estamos seguros de que se puede utilizar en la gran mayoría de las personas".
El hecho de que estas vacunas se estén desarrollando y que los investigadores como Knutson sientan esperanza es significativo.
Hubo 2 millones de casos nuevos de cáncer de mama solo en 2018, por lo que una vacuna que podría armar al mundo contra algo tan grande como el cáncer podría ser una gran noticia para garantizar una buena salud y bienestar para todos.