La aerolínea británica de bajo costo EasyJet se convertirá en la primera aerolínea importante del mundo en operar vuelos netos de carbono cero, al compensar las emisiones de carbono del combustible utilizado en todos sus vuelos.
La compensación de carbono significa proporcionar ingresos a proyectos que trabajan para reducir las emisiones de carbono a la atmósfera, o que eliminan el carbono de la atmósfera.
Esencialmente esto significa compensar cada tonelada de carbono emitido, asegurando que haya una tonelada menos en la atmósfera.
EasyJet, por ejemplo, dice que compensará sus emisiones de carbono a través de esquemas que incluyen la conservación forestal en América del Sur y África; proyectos de energía solar renovable en India; y proyectos comunitarios en Uganda y Eritrea, entre otros.
La aerolínea dijo que los programas de compensación de carbono costarían alrededor de £25 millones al año, según informó Reuters.
El CEO, Johan Lundgren, destacó que la compañía reconoce "que la compensación es solo una medida provisional hasta que otras tecnologías estén disponibles para reducir radicalmente las emisiones de carbono de los vuelos, pero queremos tomar medidas sobre el carbono ahora".
"Las personas pueden elegir cómo viajan y ahora están pensando en el impacto potencial del carbono de los diferentes tipos de transporte", agregó. "La aviación tendrá que reinventarse tan rápido como pueda".
La industria de la aviación mundial es responsable de alrededor del 2% de todas las emisiones de dióxido de carbono inducidas por el hombre, según el Grupo de Acción de Transporte Aéreo (ATAG), y alrededor del 12% de las emisiones de CO2 de todas las fuentes de transporte.
Con sus orígenes en Suecia, el país de origen de Greta Thunberg, el movimiento "flygskam", que significa "vergüenza de volar", se ha extendido por todo el mundo, ya que el interés público en la protección del medio ambiente ha crecido en los últimos años.
La propia Thunberg ha ayudado a poner el costo ambiental de los viajes aéreos en el ojo público, más recientemente navegando a los Estados Unidos y Europa para participar de las negociaciones de la ONU en un viaje transatlántico sin emisiones de carbono.
Pero el grupo de campaña ambiental Transport & Environment (T&E) ha destacado que las compensaciones de carbono de EasyJet no son una solución al problema climático de la industria de la aviación.
Según Andrew Murphy, gerente de aviación de T&E, el mundo necesita una acción mucho más fuerte por parte de los gobiernos para gravar el impacto climático de volar y desarrollar combustibles limpios.
"Las aerolíneas que pagan a otros para que puedan seguir contaminando no aportan una solución al problema climático de la aviación", dijo en un comunicado. "Las décadas de crecimiento de emisiones sin control de las aerolíneas muestran que los gobiernos deben intensificar y regular el impacto climático de la aviación al ponerle fin a los privilegios fiscales del sector y exigir combustibles limpios".
El grupo de campaña agregó que el sector de la aviación en Europa está "muy comprometido" en comparación con otras regiones. Dijo que más de 20 estados de la UE no gravan la aviación internacional en absoluto, y que ningún estado miembro grava el combustible para aviones.
Lundgren también destacó en su declaración que easyJet continuará apoyando tecnología innovadora, incluido el desarrollo de aviones híbridos y eléctricos, para ayudar a descarbonizar los viajes aéreos a largo plazo.
La esperanza, según la aerolínea, es reducir la cantidad de carbono que tiene que compensar a medida que surgen nuevas tecnologías.
Desde 2000, según su declaración, EasyJet ha "reducido las emisiones de carbono por cada kilómetro recorrido por un pasajero en más de un tercio (33.7%)".
Lo ha hecho a través de iniciativas simples como la introducción de alfombras, carros y asientos livianos; rodaje monomotor; o quitar los manuales de papel de los aviones.
EasyJet también anunció un proyecto de investigación conjunta con Airbus en aviones híbridos y eléctricos.
Según la empresa, el proyecto está configurado para "definir los impactos y los requisitos necesarios para la introducción a gran escala de aeronaves sostenibles de próxima generación en la infraestructura y las operaciones diarias de las aeronaves comerciales".