Es apropiado que al final de la conversación Sarah Humphreys — egresada de Kent de 24 años que ha tomado acciones junto a Global Citizen durante más de cinco años — comparta que su abuela murió la semana pasada. Humphreys ofreció unas palabras en su funeral apenas tres días antes.
Justo antes de que su abuela falleciera, Humphreys le había preguntado cuál era su consejo para vivir hasta los 90 años.
“Vive lo mejor que puedas y ayuda a otros sobre la marcha, en especial a aquellos que no pueden ayudarse así mismos”, le dijo su abuela.
“Y eso es exactamente lo que pienso acerca de lo que están haciendo ustedes”, afirmó Humphreys sobre Global Citizen. “Hay personas en otros países que no siempre pueden ayudarse así mismas, así que sin personas como ustedes… que realizan una petición, no contarían con una voz”.
Humphreys adora los festivales de música, Yeezy shoes y Frank Lampard. Alguna vez por accidente jugó Mario Kart con Stormzy y es medio famosa en TikTok. Pero también posee un espíritu apasionado por la justicia social: ha firmado peticiones, enviado tuits y bombardeado la bandeja de entrada del email de muchos políticos, a través de Global Citizen, insistiéndoles que hagan más para erradicar la pobreza extrema.
Como resultado, Humphreys ha ganado boletos gratuitos para eventos como el Festival Internacional Benicassim en España (“Me la pasé como nunca en mi vida”, afirmó); el Global Citizen Live en Brixton con Emeli Sandé y Professor Green; el Global Citizen Prize en el Royal Albert Hall con Stormzy; además de ver al rapero Drake dos veces en Londres en una semana alocada.
Sin embargo, no es la música lo que la mantiene motivada a tomar acción. Para ella se trata simplemente de hacer el bien como pueda.
Como cuando Humphreys en 2017 tomó acción en la campaña prolongada de Global Citizen para erradicar la polio: un virus despiadado que puede paralizar e incluso terminar con la vida de las personas y que afecta de manera desproporcionada a los niños pequeños. La campaña es un ejemplo extraordinario del movimiento en acción de Global Citizen: cómo una onda pequeña de acciones puede transformarse en un gran cambio global. Ésta es la historia de cómo las acciones de Humphreys condujeron a un impacto tremendo.
La poliomielitis, o polio, se ha erradicado 99.9% a nivel mundial. Un logro impresionante.
En 1988, la polio era común en más de 125 países. Sin embargo, actualmente es endémica solo en dos países. En aquel entonces, los casos de poliovirus salvaje disminuyeron de 350,000 en 1988 a 129 a la fecha en 2020, mientras que en Gran Bretaña no se ha visto un caso natural desde 1984.
Pero antes de que la vacuna de la polio se introdujera por primera vez en 1956, las epidemias en Gran Bretaña significaban que hubieran 7,760 casos de polio paralítica al año, con más de 750 casos que resultaban en la muerte. La enfermedad afectó a personalidades de la talla de Mary Berry del programa de televisión Great British Bake Off, a la leyenda punk Ian Dury, al ícono del folk Joni Mitchell e incluso al Expresidente de Estados Unidos Franklin D. Roosevelt.
“Sola y sintiéndome terrible, la única cosa que deseaba era a mi madre”, afirmó Berry al Daily Mail en 2013, al reflexionar sobre su confinamiento en una habitación de vidrio aislada durante un mes después de contagiarse con el virus a la edad de 12 años. “Pero mis padres tenían que quedarse al otro lado del vidrio, solo podían sonreír y pronunciar palabras de consuelo. Tan solo inclinar mi cabeza para poder verlos exigía toda mi fuerza”.
“Durante sus visitas, lloraba a mares”, agregó. “Simplemente no podía entender por qué mi mamá no podía entrar y darme un abrazo, hablar conmigo y consolarme. Debió ser terriblemente traumático para ellos”.
Para Humphreys, la batalla para relegar la polio a los libros de historia está enraizada en la desigualdad. Afirma que no es justo que Gran Bretaña tenga un Servicio Nacional de Salud y que otros países no cuenten incluso con acceso a la más simple de las vacunas contra el virus.
“Tomé medidas contra la polio por primera vez porque está mal que el virus todavía ande por ahí”, afirmó Humphreys. “Aunque casi ha desaparecido y estamos bastante cerca de erradicarlo, los países que no pueden ayudarse a sí mismos no cuentan con los recursos o el dinero para obtener las vacunas”.
“Pienso que ahora que tenemos las vacunas, deberíamos hacer oír nuestras voces para ayudar a los países que también las necesitan”, añadió.
Después de firmar la petición, Humphreys comenzó a investigar más acerca de la polio en la plataforma de Global Citizen. Leyó artículos, miró videos y entabló una discusión sobre el virus con su papá. Pronto descubrió que la enfermedad está entretejida con la propia historia de su familia.
“Cuando hablé con mi papá acerca de Global Citizen y la campaña contra la polio, me dijo que de hecho la hermana de mi abuela tuvo polio cuando era niña”, afirmó Humphreys. “No esperarías que alguien que conoces tenga la enfemedad. Si la gente no habla de estas cosas, no te das cuenta cuántas personas de hecho la han tenido”.
“Nuestra generación en realidad no la tiene”, añadió. “Pienso que es triste que en otros países todavía exista la enfermedad, se trata de los miembros de la familia de otras personas. Si te contagias aquí, tenemos el Servicio Nacional de Salud que trata los síntomas. Pero en otros países cuando las personas se contagian, son más afectadas por la enfermedad ya que ésta afecta todo su cuerpo y el resto de sus vidas”.
“El asunto se vuelve personal porque no sabes qué tan cerca está de ti. Es duro que estas cosas todavía pasen en otros países”, dijo.
La poliomielitis es también una de las grandes razones por las que se creó Global Citizen en principio.
El año anterior al primer Global Citizen Festival que llenó el Central Park en Nueva York con 60,000 activistas jóvenes gritando por Neil Young y los Foo Fighters, se realizó otro evento en Australia bajo un nombre muy diferente.
Se llamó “Concierto para erradicar la polio”: un espectáculo para 5,000 Global Citizens en Perth con John Legend y otros amigos en la víspera de la Reunión de Jefes de Gobierno de la Mancomunidad en 2011. ¡Sucedió hace tanto tiempo que el concierto fue el enfoque del primer video que posteó Global Citizen en YouTube!
Global Citizen aprovechó el festival para solicitar el apoyo de los líderes del mundo a la Iniciativa de Erradicación Global de la Polio (GPEI por sus siglas en inglés), asociación que, entre otras cosas, entregó vacunas antipoliomielíticas que salvan vidas a millones de niños en todo el mundo.
Lanzada en 1988, la GPEI es una asociación global que tiene como objetivo atraer fondos para erradicar la polio. Aproximadamente 18 millones de personas caminan actualmente que, de otro modo, podrían haber sido paralizadas por la enfermedad. Así mismo, más de 1.5 millones de personas están vivas, cuyas vidas sin embargo podrían haberse perdido.
Descrito como un “momento decisivo” por la Organización Mundial de la Salud (OMS) en los esfuerzos para erradicar la polio de una vez por todas, el concierto funcionó: se aseguraron otros 118 millones de dólares adicionales. Después de dicho suceso, Global Citizen se mantuvo, especialmente en Gran Bretaña.
De 2012 a 2013, los Global Citizens tomaron 152,000 acciones dirigidas al gobierno británico, solicitando más fondos para la GPEI. La medida también funcionó. En abril de 2013, el Departamento de Desarrollo Internacional de Gran Bretaña (DfID por sus siglas en inglés) asignó 300 millones de libras durante los próximos seis años.
Sin embargo, no fue suficiente. Global Citizen debió dar un paso adelante.
“No tiene sentido llegar hasta aquí para después dejar todavía algunas personas que pueden ser afectadas por la enfermedad”, afirmó Humphreys. “Nadie debe prescindir de las vacunas”.
Durante los próximos cuatro años, los líderes del mundo cada vez hablaban menos de la polio. Pero Global Citizen siguió gritando: entre 2015 y 2017, los Global Citizens como Humphreys llevaron a cabo otras 481,000 acciones adicionales, incluyendo la firma de una petición y el envío de un tuit a la ex primera ministra británica Theresa May.
En el Reino Unido en específico, se tomaron más de 35,000 acciones para apoyar la campaña en colaboración con M&C Saatchi. Global Citizen incluso fue al Museo de Ciencias en Londres para invitar a las personas a jugar el Reto del helicóptero, que consistía en aterrizar con éxito un pequeñísimo helicóptero a control remoto lleno de vacunas imaginarias, reclutando así mismo a más de 100 Global Citizens a la causa en el proceso.
.@JustinTrudeau@Theresa_May a polio-free world can be this generation's legacy. Pls pledge to fund #endpolio efforts & leave no one behind.
— Tamzin Merchant (@tamzinmerchant) September 25, 2016
El exfuncionario de la campaña Paul Abernethy trabajó en Global Citizen de 2014 hasta 2018. Durante ese periodo de tiempo, dirigió la campaña de promoción para lograr que el Reino Unido se comprometiera de nuevo con la GPEI, en un momento en el cual la agenda doméstica estaba rebasada por el referéndum para salir de la Unión Europea y sus consecuencias caóticas.
Pero Abernethy afirmó que los miles de Global Citizens, que enviaron tuits y firmaron peticiones, provocaron que el “mensaje se escuchara fuerte y claro”.
“Históricamente, el Reino Unido siempre ha sido uno de los donadores más activos y grandes en la lucha de la erradicación de la polio, así que era muy importante que renovaran su compromiso con un apoyo financiero fuerte, pero no se trataba solo de proveer el dinero tan necesitado, sino de incitar a otros donadores en el año que se consideró decisivo para la erradicación de la enfermedad”, afirmó Abernethy.
Sin embargo, esto no sucedió sin sus retos. La inestabilidad política es una cosa, pero tratar de contar una historia convincente sobre la erradicación de la polio — una enfermedad que no se ha visto en Gran Bretaña durante décadas — es otra cosa muy distinta. Puede resultar un tema difícil de tratar.
“Para muchos, es una enfermedad abstracta que se da en algunos países del mundo”, afirmó Abernethy. “Pero la historia reciente de la enfermedad está mucho más próxima a nosotros. Un sinnúmero de Global Citizens más jóvenes no se habían dado cuenta que la polio era una enfermedad común aquí en el Reino Unido, hace apenas 40 años”.
Jeff Hall tragically died less than two years after starring for @BCFC in an FA Cup final. But his death truly changed the game — and the country — forever.
— Global Citizen UK (@GlblCtznUK) May 3, 2019
Learn more about him and take action to continue his legacy: https://t.co/X3BHD7oMCr#VaccinesWork#OneLastPush#EndPoliopic.twitter.com/BRhqXsUsJw
“Sus padres, sus tías y tíos, sus abuelos todos tuvieron que vivir con la amenaza de esta horrible enfermedad”, añadió. “Así que mientras era difícil hablar sobre la enfermedad en un principio, una vez que nuestros partidarios conocieron la historia reciente de la polio, los retos se volvieron entonces una oportunidad. La gente entendió que si se pudo erradicar en el Reino Unido entonces podía ser erradicada en Pakistán o Afganistán o Nigeria.”
“Esto le dio a la gente esperanza que convirtió en acción. De hecho fue bastante bello presenciarlo”, afirmó.
La campaña fue recibida cordialmente, con numerosas intervenciones privadas del gobierno por parte de los miembros del Parlamento. Y finalizó con la Baronesa Scotland, Secretaria General de la Mancomunidad de Naciones, subiendo al escenario del Global Citizen Festival 2016 en Central Park para comprometerse a apoyar.
“Prometo apoyar todos los esfuerzos para lograr un mundo libre de polio, una enfermedad que se ha erradicado 99.9%”, afirmó Scotland. “No podemos detenernos ahora”.
Lo anterior avivó una labor de promoción intensa tras bambalinas, incluyendo una reunión que culminó en un discurso realizado en la Cámara de los Lores por la Baronesa Jenkin el 16 de marzo de 2017.
“A tenor de los objetivos de desarrollo sustentables, Global Citizen cree que, al demostrar la voluntad política y financiera que se necesita para lograr un mundo libre de polio para 2020, podemos garantizar que nadie se quede atrás”, afirmó.
Parecía que el Reino Unido estaba listo para hacer otro compromiso financiero grande. Pero el 17 de abril, la campaña se hundió en la confusión: la Exprimera Ministra Theresa May convocó a elecciones anticipadas y las prioridades cambiaron.
Sin embargo, Global Citizen estaba listo para cualquier resultado. En cuanto terminaron las elecciones en junio, los Global Citizens solicitaron que el nuevo gobierno comprometiera más fondos para la GPEI en sus primeros 100 días.
Y finalmente, el siguiente mes en agosto de 2017, la campaña llegó a su punto álgido cuando Gran Bretaña anunció que comprometería los otros 100 millones de libras que Global Citizen había solicitado.
El resultado fue impresionante. De inmediato, los Global Citizens enviaron 2,000 correos electrónicos para agradecer al DfID por dar el ejemplo.
“Se debe a esfuerzos como éstos que la polio esté a punto de convertirse en la segunda enfermedad erradicada en la historia de la humanidad”, expresó el Exministro del DfID, Alistair Burt, en septiembre de 2017 en el Global Citizen Live en la Ciudad de Nueva York. Burt elogió cómo el compromiso del Reino Unido “inmunizaría a 45 millones de niños contra la enfermedad al año, hasta el 2020.”
Este financiamiento significó que cada minuto, otros 80 niños serían inmunizados contra la polio en algún lugar del mundo.
“Me siento realmente orgullosa y estupenda que nuestro gobierno comprometió 100 millones de libras para asistir a los países que necesitan obtener vacunas para ayudar a prevenir la polio”, afirmó Humphreys.
“Aunque es fantástico que hayamos podido comprometer esta suma, pienso que podemos ir un paso más adelante y asegurarnos de que todo el mundo esté protegido contra la enfermedad”, añadió.
Thanks to the work of organisations like @rotary@gatesfoundation@resultsuk@GlblCtzn@WHO and #UKaid we can #EndPolio for good. pic.twitter.com/43ZLdXJRju
— DFID (@DFID_UK) August 2, 2017
Amazing news https://t.co/gWgtkdJoYh
— Rakhee Thakrar (@RakheeThakrar) August 4, 2017
Desde este compromiso decisivo, el mundo ha cambiado de manera fundamental.
Si pronuncias la palabra “virus” ante alguien en la calle, quizás la polio no esté en su mente. En su lugar, la pandemia del COVID-19 ha ocupado el centro del escenario. Sin embargo, esto significa que el estado de la salud global probablemente nunca había recibido un interés público superior. La gente quiere estar segura de que un brote devastador y rápido como tal nunca sucederá de nuevo.
Lo anterior es relevante para la labor de la GPEI ya que prevenir pandemias es su trabajo vital. De hecho, durante toda la crisis, la asociación se ha adaptado, al desplegar personal experimentado y probar las capacidades de los esfuerzos de avanzada para combatir al coronavirus, procurando al mismo tiempo continuar con los planes rutinarios de inmunización para que los países no tengan que luchar contra múltiples pandemias al mismo tiempo.
La capacidad de la GPEI para moverse con tanta rapidez en el COVID-19 es una prueba de la importancia continua de las miles de acciones de los Global Citizens que condujeron al compromiso por parte del DfID en 2017, y de la utilidad que indudablemente traerá cualquier apoyo futuro.
“Global Citizen y sus vínculos con [las] bases son una entidad asociada fundamental en el esfuerzo global para erradicar la polio”, afirmó a Global Citizen Michel Zaffran, Director de la GPEI. “La erradicación de la Polio en esencia es un programa que le pertenece a la comunidad, además de tener como base la comunidad, y la participación y el compromiso de los ciudadanos privados en todo el mundo es crucial para garantizar el impulso que se requiere para lograr el éxito”.
Y al mismo tiempo, si bien el año 2020 será recordado por algunos días verdaderamente oscuros, ha habido una luz de esperanza en la larga lucha por la salud global. En agosto, África fue finalmente declarado libre de poliomielitis salvaje, suceso descrito como “uno de los grandes logros en salud pública de nuestro tiempo” por el Dr. Tedros Adhanom Ghebreyesus, Director general de la OMS.
“Estábamos, y aún estamos, tan cerca de erradicar la polio para siempre”, afirmó Abernethy. “Ahora éste es el último empujón, así que fue de suma importancia que los gobiernos dieran un paso adelante y finalizaran el trabajo”.
“Si el brote reciente de COVID-19 nos ha enseñado algo es qué tan interconectado está el mundo, y nuestra fuerza está determinada por nuestro sistema de salud más débil”, añadió. “Si los gobiernos no se hubieran esforzado entonces, y no se esforzaran ahora, la polio se propagaría en todo el mundo y podríamos haber retrocedido aproximadamente 40 años de progreso”.
Para Humphreys, el compromiso del Reino Unido de financiar la GPEI fue personal: para su abuela, para ella misma y para sus valores, ante todo, como ciudadana del mundo. Afirma que está ansiosa por involucrase en más campañas y exhorta a otros como ella a unirse también. El movimiento de Global Citizen tiene la suerte de contar con ella.
“Pienso que tomar medidas con Global Citizen es tan importante porque las tareas que te pide hacer son tan simples. Pero ese par de minutos que te toma ir y leer sobre una causa y hacer algo al respecto puede provocar un cambio en la vida de las personas necesitadas”, afirmó Humphreys. “Creo que esto es realmente importante porque si la gente no lo hace no estaríamos en la etapa que estamos ahora”.
Añade: “Si alguien puede tomarse solo un par de minutos de su día y hacer una pequeña acción como enviar un correo electrónico — y muchos están dispuestos a hacerlo —, entonces esto podría hacer una gran diferencia”.
Traducción de Adam Critchley.