Un estudio que acaba de publicarse muestra la correlación entre el hambre mundial y el cambio climático.
La Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) publicó este martes su tercer informe anual sobre las crisis alimentarias mundiales. Descubrió que más de 113 millones de personas han experimentado "hambre aguda" en 53 países en 2018, y los conflictos, los desastres climáticos y las dificultades económicas son los culpables.
José Graziano da Silva, director general de la FAO, escribió en Twitter que el número de personas que mueren por causas relacionadas con el hambre y el conflicto es "inaceptable".
Dos tercios de las personas que están en peligro de estar expuestas a la hambruna viven en países devastados por la guerra, como Yemen, la República Democrática del Congo, Afganistán y Siria. Los países africanos fueron los más afectados por conflictos y desastres naturales. Aproximadamente 72 millones de personas en el continente sufrieron hambre aguda en 2018, dijo a la Agence France-Presse, el Director de Emergencias de la FAO, Dominique Bourgeon.
De acuerdo con el informe de la FAO, un solo desastre natural podría llevar a las personas que dependen de la agricultura a la hambruna. Bourgeon explicó que las personas más vulnerables del mundo necesitan ayuda humanitaria y recursos para impulsar la agricultura para sostenerse a sí mismos.
Por un lado, la cantidad de personas que experimentaron hambre aguda disminuyó en 2018 en comparación con el 2017, cuando 124 millones de personas no tenían suficientes alimentos para comer, según informó la Fundación Thomas Reuters. Menos sequías, inundaciones, lluvias irregulares y aumentos de temperatura ayudaron a disminuir la crisis alimentaria mundial, pero eso no quiere decir que el cambio climático no sea una amenaza.
La FAO anticipa que el clima seco y las condiciones de El Niño afectarán a las personas en el sur de África, América Latina y el Caribe en 2019. Un aumento en el número de refugiados y migrantes en Bangladesh y Siria también dejará a muchas personas con hambre, según el informe.
Bourgeon destacó la actual crisis humanitaria venezolana, que ha provocado que millones huyan, como una preocupación importante.
Con el fin de reducir el hambre en el mundo, la FAO está pidiendo un esfuerzo unificado para poner fin a los conflictos y promover la paz. Graziano da Silva dijo que se necesitan más programas para estabilizar a las comunidades.
To the press in 🇧🇪 : global #hunger is growing mainly in countries affected by #conflicts and #climatechange. We need to build #resilience especially of #women and #youth. At the #Sahel, we are working w/ 🇪🇺 to train and support pastoralists. And we can do more! pic.twitter.com/QKfyLLFL7O
— José Graziano da Silva (@grazianodasilva) April 2, 2019
"Para realmente acabar con el hambre, debemos atacar sus causas fundamentales: el conflicto, la inestabilidad, el impacto de las crisis climáticas", dijo Graziano da Silva en un comunicado de la FAO.
"Los niños y las niñas deben estar bien nutridos y educados, las mujeres deben tener un verdadero poder, y la infraestructura rural debe fortalecerse para cumplir con el objetivo de Hambre Cero".