La Ciudad de México se ha unido a una creciente lista de ciudades que prohíben las bolsas de plástico de un solo uso después de una ley que entró en vigencia el 1 de enero, según informó Associated Press.

Según esta nueva ley, las empresas que continúen distribuyendo bolsas de plástico recibirán una multa y las que fabrican bolsas de plástico tendrán prohibido venderlas a otras empresas en la Ciudad de México.

Otra prohibición de otros tipo de plásticos de un solo uso, como sorbetes y platos de plástico, entrará en vigencia en 2021.

La Ciudad de México ha tenido problemas con cantidades excesivas de basura durante años. El plástico solo recientemente se volvió reciclable en la ciudad, lo que significa que la gran mayoría del plástico desechado potencialmente ha terminado en vertederos o ha contaminado el medio ambiente.

La contaminación plástica es un problema global, especialmente en ambientes marinos. Los animales marinos como las ballenas y las tortugas han muerto después de confundir el plástico con comida, y 50 billones de microplásticos invaden el océano.

Las bolsas de plástico, en particular, son una de las formas más comunes de contaminación marina. Solo el 5% de las bolsas de plástico de un solo uso se recicla.

Cada año, alrededor de 8 millones de toneladas de desechos plásticos llegan a los océanos, lo que ha impactado a casi 700 especies, según informó National Geographic.

A medida que la escala de contaminación plástica se hace más evidente, los gobiernos locales, estatales y nacionales han comenzado a restringir la producción de plástico.

Cientos de municipios de todo el mundo han instituido prohibiciones a las bolsas de plástico, incluidas ciudades mexicanas como Querétaro y Tijuana, según informó el Mexico News Daily.

Según ha quedado demostrado las prohibiciones de bolsas de plástico reducen significativamente la cantidad de desechos plásticos encontrados en ambientes marinos.

Sus críticos argumentan que las prohibiciones de bolsas de plástico pueden tener consecuencias no deseadas y no abordan el problema más profundo de los envases de plástico. Una preocupación común es que este tipo de prohibiciones simplemente llevarán a los consumidores a usar bolsas de papel de un solo uso. Los defensores de la prohibición dicen que lo más importante es incentivar a los consumidores no solo a deshacerse del plástico, sino también a comprar bolsas reutilizables.

"Es por eso que cualquier buena prohibición de las bolsas de plástico intenta evitar un aumento en el uso de bolsas de papel al implementar también una tarifa a su utilización, idealmente empujando a los compradores a traer bolsas desde sus casas en su lugar", según explicó Jennifer Sass, científica del Consejo de Defensa de Recursos Naturales a NRDC.

En el caso de la Ciudad de México, los supermercados ofrecerán bolsas de compras reutilizables por un precio estimado de 75 centavos.