Naciones Unidas y organizaciones asociadas, entre ellas Global Citizen, solicitan fondos de emergencia para apoyar a los refugiados y civiles afectados por la invasión rusa a Ucrania.

El Llamado de Emergencia para Ucrania 2022, de 1.700 millones de dólares, responde a la urgente necesidad humanitaria que crece a medida que aumentan los civiles que huyen de la violencia, lo que provoca una interrupción de los suministros y servicios esenciales, según Reuters.

La ONU calcula que 12 millones de personas dentro de Ucrania necesitarán ayuda y protección, mientras que más de 4 millones de refugiados ucranianos podrían necesitar protección y asistencia en los países vecinos en los próximos meses.

El jefe de ayuda de la ONU, Martin Griffiths, destacó la urgencia de la situación en una rueda de prensa en Ginebra.

"La crisis se ha puesto muy fea muy pronto", dijo Griffiths. "Debemos convertir esa conmoción e incredulidad iniciales, así como la incertidumbre sobre los próximos días, en compasión y solidaridad con los millones de ucranianos de a pie que ahora necesitan ayuda de emergencia".

En el momento de la sesión informativa, 150.000 personas más habían huido de Ucrania en las últimas 24 horas, lo que eleva el número total de refugiados a unos 677.000, según el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados. Se calcula que la mitad de los ucranianos que han huido están en Polonia, 60.000 refugiados están en Moldavia, unos 50.000 en Eslovaquia y 40.000 en Rumanía.

En los próximos tres meses, 1.100 millones de dólares ayudarían a 6 millones de personas que viven en Ucrania.

Los fondos se destinarán a suministrar refugio, servicios sanitarios, alimentos, agua y saneamiento, así como apoyo a la educación, detalló el secretario general de la ONU, Antonio Guterres. Las agencias de la ONU ampliarían y aumentarían los programas existentes al tiempo que establecerían esfuerzos de ayuda para responder a las nuevas necesidades, explicó Guterres. Si la violencia en las ciudades ucranianas aumenta, las necesidades humanitarias podrían ser aún mayores.

El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados, Filippo Grandi, advirtió que es crucial actuar con rapidez.

"Estamos ante lo que podría convertirse en la mayor crisis de refugiados de Europa en este siglo", dijo Grandi. "Aunque hemos visto una enorme solidaridad y hospitalidad por parte de los países vecinos a la hora de recibir a los refugiados, incluso por parte de las comunidades locales y los ciudadanos particulares, se necesitará mucho más apoyo para asistir y proteger a los recién llegados".