Por qué es importante para los Global Citizens
El Objetivo Global 4 tiene como objetivo garantizar una educación de calidad inclusiva y equitativa y promover oportunidades de aprendizaje para todos a lo largo de su la vida. ACNUR, la Agencia de la ONU para los Refugiados, ofrece ayuda humanitaria, increíblemente necesaria en una de las crisis humanitarias de más rápido crecimiento en el mundo, especialmente a aquellos niños que abandonaron la escuela para comenzar una nueva vida en una cultura diferente. Puedes obtener más información sobre el tema en el episodio 3 de ACTIVATE: El Movimiento Global Citizen, y unirte a nosotros para tomar medidas sobre estos temas aquí.

La crisis humanitaria en Venezuela es una de las peores y de más rápido crecimiento que el mundo ha visto en los últimos años. Los refugiados que caminan durante meses, sin comida ni agua, solo para buscar ayuda y la oportunidad de una vida mejor en los países cercanos, son parte de una situación más grande que requiere ayuda y acción urgente.

Y los niños están, sin duda, entre los más perjudicados por la crisis. Por lo general, tienen que abandonar la escuela para comenzar largos viajes con sus padres para sobrevivir, lo que interrumpe su derecho a la educación.

En el tercer episodio de ACTIVATE: El Movimiento Global Citizen, nuestra serie documental de seis partes desarrollada por National Geographic y Procter & Gamble, en asociación con Radical Media y Global Citizen, la actriz y embajadora de Global Citizen, Rachel Brosnahan, el CEO de Global Citizen, Hugh Evans, y Madge Thomas, Directora Senior de Política Global y Asuntos Gubernamentales de Global Citizen, visitaron la ciudad fronteriza de Tumbes, Perú.

En el episodio, escucharon las historias de refugiados venezolanos, y de aquellos niños cuyas vidas fueron afectadas recientemente por deslizamientos de tierra, que finalmente pudieron reconstruir sus vidas y encontrar lugares seguros para estudiar, gracias a la campaña Education Cannot Wait (la educación no puede esperar).

Education Cannot Wait (ECW) es un fondo que trabaja para garantizar que todos los niños afectados por conflictos o crisis tengan acceso a una educación segura, gratuita y de calidad para 2030.


Global Citizen habló con Regina De La Portilla, oficial asociada de información pública de ACNUR, a quien puedes ver en el tercer episodio de ACTIVATE, que ya se emite en National Geographic y online.



Image: Ryan Gall/Global Citizen

GLOBAL CITIZEN: ¿Cuántos refugiados venezolanos ingresan a Perú todos los días?

Regina De La Portilla: Más de 280,000 venezolanos han solicitado la condición de refugiado en Perú, convirtiéndolo en el primer país de destino para solicitantes de asilo de Venezuela en el mundo. Además, con más de 860,000 venezolanos se ha convertido en el segundo país receptor de población venezolana a nivel mundial.

A principios de 2019 entraban cerca de 2,000 venezolanos por día a Perú. Cada día llegaban más familias con niños y niñas, y cada vez con menos recursos. Muchos se encuentran en necesidad de asistencia humanitaria inmediata. Llegan tras semanas, a veces después de meses de caminar por Colombia y Ecuador, comiendo lo mínimo.

Desde la implementación del requisito de Visa Humanitaria para el ingreso de venezolanos en Perú, el número de personas que ingresan de manera regular al país ha decrecido. Sin embargo, hay muchas personas que, al no poder obtener la documentación requerida, se ven obligados a utilizar rutas peligrosas e informales, poniendo sus vidas en peligro, para llegar a un lugar seguro para sobrevivir. Esto los hace más vulnerables a redes de tráfico y trata, por ejemplo.


El 90% de los refugiados que solicitan asilo en Perú en este momento serían venezolanos. ¿Cuál es el programa de ACNUR que los ha recibido y cómo trabajan junto a ellos para que puedan adaptarse?

Ante el aumento de la llegada de personas venezolanas solicitantes de la condición de refugiado al Perú, ACNUR estableció una presencia permanente en 2018, y en menos de un año abrimos  cinco oficinas, en Lima, Tumbes, Tacna, Cusco y Arequipa.

En ACNUR trabajamos para complementar los impresionantes esfuerzos de las autoridades nacionales y locales, y de manera articulada con nuestros socios, organizaciones de la sociedad civil y otras agencias de Naciones Unidas. Nuestro trabajo en Perú está orientado a brindar asistencia a las personas en necesidad de protección internacional y a las comunidades peruanas que los acogen.


Image: Ryan Gall/Global Citizen

¿Cuáles son esas líneas de trabajo?

Tenemos cuatro líneas clave de trabajo en el Perú:

Coordinación: En Perú, ACNUR co-lidera con OIM, el Grupo de Trabajo de Refugiados y Migrantes conformado por más de 40 miembros que incluyen organizaciones de la sociedad civil, organizaciones internacionales, agencias de la ONU, y que articula la respuesta para las personas venezolanas en el país, con especial foco en fortalecer a las comunidades que las acogen.

Asistencia humanitaria: Ante las necesidades apremiantes de la población venezolana que llega al Perú, ACNUR y nuestros socios estamos ofreciendo asistencia humanitaria. Esta incluye asistencia médica de emergencia, asistencia médica básica, apoyo en albergue, para transporte, así como alimentación. Adicionalmente se ha iniciado un proyecto de asistencia humanitaria multipropósito, que permite a las personas venezolanas utilizar recursos financieros para cubrir sus necesidades básicas.

Más de 40,000 personas han recibido artículos de primera necesidad. Más de 5,000 personas han recibido asistencia médica. Más de 10,000 personas han pernoctado en los albergues de frontera. Más de 3,400 tarjetas multipropósito han sido entregadas. 

Protección: Algo muy importante es que los refugiados y migrantes tengan la documentación adecuada para su protección y el acceso a servicios básicos. ACNUR trabaja de la mano con la Comisión Especial para Refugiados de Perú para que los solicitantes de la condición de refugiado tengan su carnet de solicitantes lo antes posible, así tienen derecho a acceder a medios de vida, por ejemplo. Para esto, trabajamos en la actualización del sistema y el software utilizado para el registro. Gracias a este proceso más de 23,000 carnets han sido entregados en los últimos meses. También hemos trabajado para apoyar a la Superintendencia Nacional de Migraciones.

Además, trabajamos para que se reconozcan los derechos fundamentales de las personas y tengan acceso a servicios básicos. Por ello trabajamos y apoyamos a la Defensoría del Pueblo, que ha podido contratar 10 nuevos oficiales para distintos puntos del país que puedan ayudar a refugiados, migrantes y peruanos.

ACNUR también trabaja en la reducción de la violencia de género por medio de diferentes programas y con diferentes socios especializados. Así como trabajamos también con nuestro socio PROSA con quien apoyamos a la comunidad LGTBI y a las personas con VIH.


¿Cómo es el proceso mediante el cual los ayudan a integrarse a la comunidad?

La cuarta línea de trabajo es la Integración: ACNUR trabaja por medio de la protección con base comunitaria. Esto significa que trabajamos de la mano con las comunidades receptoras para identificar riesgos, explorar sus causas y efectos, y decidir conjuntamente cómo prevenirlos y responder a ellos.

Gran parte de nuestro trabajo se orienta para ayudar a las personas refugiadas a integrarse. Para esto tenemos diferentes proyectos de empoderamiento y una campaña de sensibilización llamada TuCausaEsMiCausa. Más de 8,000 personas han participado en actividades de integación TuCausaEsMiCausa.

Trabajamos también en temas de medios de vida para promover la inclusión económica de personas obligadas a abandonar sus hogares o sus países, para que tengan una vida digna, y reducir la carga sobre el estado de acogida. Creamos alianzas con el sector privado, capacitamos empresas en temas de contratación, apoyamos a pequeños emprendedores con recursos, fortalecemos proyectos de incubadora y ONG de refugiados y migrantes, entre otros.



Image: Ryan Gall/Global Citizen
Los niños que experimentan una situación traumática en la región habitualmente dejan de asistir a la escuela y no reciben el apoyo necesario. ¿Cómo los ayuda el programa de ACNUR en esa situación? ¿Puedes darme, por favor, ejemplos de casos concretos en los que hayan trabajado?

Más de 20 por ciento de las personas venezolanas en el Perú son niñas, niños y adolescentes. Han debido abandonar sus hogares, sus escuelas y sus vidas porque sus padres se vieron obligados a salir de su país para poder sobrevivir. Esta situación y el viaje generan traumas para los niños y niñas y sus familias. Por eso, es indispensable apoyar su integración.

En el caso de Perú, estamos apoyando un programa del Estado que se llama Lima Aprende. Este programa busca que ningún niño o niña se quede sin estudiar, sin importar de dónde viene. Desde ACNUR, hemos venido apoyando este programa estatal con nuestra asesoría técnica, y con recursos. Hace algunos días entregamos más de 800 kits escolares para niñas y niños venezolanos y peruanos vulnerables que pertenecen a este programa.

Otro ejemplo de nuestro trabajo es el de las Ferias de Integración que realizamos con nuestros socios. Les llamamos Creando Juntos porque la idea es que niñas, niños y sus familias participen compartiendo sus conocimientos y capacidades. En estas ferias se intercambian las tradiciones y así se aprenden danzas típicas de ambos países, se prueban platos típicos de Venezuela y Perú, y se comparten experiencias artísticas para crear en conjunto. La última Feria la realizamos en Arequipa, donde participaron más de 400 personas. En esta feria una brigada de venezolanos, llamada Gracias Causa, parte de nuestra campaña #TuCausaEsMiCausa, sorprendió al colegio renovando el patio escolar, pintando un ajedrez gigante y un mural de integración. 


Respecto al aspecto psicosocial, ¿cómo es el trabajo integral realizado para que puedan integrarse nuevamente al sistema educativo sin problemas? 

Para ampliar la protección de niñas, niños y adolescentes trabajamos con nuestro socio Plan Internacional. Con ellos estamos implementando jornadas de protección para los más pequeños con un libro interactivo llamado Mi Viaje. Este libro permite a niñas y niños compartir sus emociones con personas especialistas en la protección de la infancia. Dibujan sobre las experiencias vividas en su viaje, lo que más les ha gustado, lo que no les ha gustado e incluso lo que les ha dado miedo. Es una herramienta importante de apoyo psicosocial para tratar el trauma y ayudarles a sentirse mejor al llegar a su nuevo país.

Así mismo, estamos por lanzar una iniciativa de cuenta cuentos para colegios, con base en un cuento infantil llamado “Pabellón y su Gran Nariz”. Este libro ayuda a los niños y niños a entender lo que significa tener que abandonar su país. El principal objetivo es que los menores de las comunidades que los reciben, puedan ponerse un momento en el lugar de los refugiados y migrantes. Esto ayuda a fortalecer la solidaridad, reducir la discriminación y el rechazo.


Image: Ryan Gall/Global Citizen

En el caso de los niños venezolanos, muchos se ven forzados a trabajar para salir de la pobreza ¿cómo trabajan desde ACNUR u otros programas, junto a sus padres para lograr reinsertarlos en el sistema educativo?

Desde ACNUR estamos trabajando para reducir las vulnerabilidades de las personas refugiadas y migrantes venezolanos. Estamos ampliando nuestra presencia para poder brindar orientación e información para que las personas venezolanas puedan cumplir sus necesidades básicas y acceder a derechos. Esta semana hemos inaugurado tres nuevos centros de apoyo para refugiados y migrantes en Lima, los CAREMI. Aquí proveemos de información a familias para que sepan cómo y dónde inscribir a las niñas y niños en los colegios.

Con ayuda de nuestros socios, hemos podido acompañar a muchas niñas y niños para que sean inscritos en los colegios. En Tumbes, por ejemplo, con Plan Internacional tenemos un proyecto con promotores adolescentes que nos ayudan a orientar a las personas venezolanas y peruanas. Les informan sobre sus derechos y responsabilidades, tanto a grandes como también a chicos. En algunos casos también han ayudado a referir a familias donde los hijos o hijas no asistían al colegio, para que las organizaciones competentes les ayuden a inscribir a los más pequeños. Gracias al éxito del proyecto, ahora también se está realizando en Lima y Arequipa.


Sería muy interesante, por favor, desarrollar más acerca de cómo ACNUR y el gobierno del Perú han logrado cambiarle la vida a tantos refugiados venezolanos y los han asistido en uno de los procesos migratorios más complejos de la región.

Perú fue el primer país de Latinoamérica en introducir una medida (PTP) que permite a las personas acceder a derechos fundamentales, como a la educación. Más de 400,000 han podido acceder a este estatus. Esta medida marcó un momento de vanguardia en la política pública con respecto a la protección de las personas venezolanas. Otros países también han introducido medidas similares desde entonces, como Colombia y Brasil.

Desde ACNUR continuamos apoyando al Gobierno y esperamos que a pesar de la eliminación del PTP, se mantenga esta buena práctica de tener un permiso que permita la regularización de las personas en el país y les permita acceder a derechos fundamentales.  Las personas que no tienen acceso a la regularización están expuestos a mayores riesgos, como son la explotación sexual, laboral, la violencia y la discriminación, por ello, para ACNUR es primordial encontrar soluciones migratorias para reducir la vulnerabilidad de las personas venezolanas.

Es importante señalar que el tan sólo recibir a los refugiados y migrantes venezolanos se les está dando una línea de vida, una oportunidad de vivir con dignidad y de reconstruir sus vidas para alcanzar sus sueños.

La prueba de que la generosidad en cómo han sido recibidos les ha cambiado la vida es que ya se han sumado más de 200 voluntarias y voluntarios a realizar jornadas de voluntariado para demostrar a las personas peruanas que están agradecidos, y sobre todo que pueden contribuir a este país. Las brigadas Gracias Causa (causa significa amigo en jerga peruana) reúnen a médicos que apoyan con jornadas gratuitas a comunidades vulnerables; estilistas y barberos que regalan cortes de cabello a niñas y niños; limpieza de playas; arreglo de colegios, entre muchos otros. Desde ACNUR los apoyamos con recursos y asistencia técnica para que puedan realizar estas acciones que tienen un gran impacto en sus comunidades de acogida.


¿Cuáles son los principales desafíos que aún quedan por resolver para inmigrantes y refugiados en la región actualmente?

A pesar de que muchos gobiernos de la región han sido generosos con su respuesta, se necesita mayor apoyo por parte de la comunidad internacional para complementar sus esfuerzos. Se requieren con urgencia tanto una ampliación de la asistencia humanitaria, como un mayor apoyo a los mecanismos de inclusión socioeconómica, para complementar los esfuerzos de los gobiernos y asegurar que las comunidades continúan aceptando a los refugiados y migrantes en ambientes seguros y acogedores.        

ACNUR y OIM co-lideramos una Plataforma Regional que trabaja en el marco de un Plan de Respuesta para Refugiados y Migrantes, con más de 95 aliados, que tiene como objetivo priorizar tanto las necesidades de más de 2.2 millones de refugiados y migrantes, como las de medio millón aproximadamente de miembros de las comunidades de acogida.  

El plan regional busca responder a las necesidades de la población de una manera integrada y exhaustiva, de acuerdo con las prioridades de los gobiernos y apoyando su respuesta regional.


¿Cuáles son los objetivos estratégicos?

  1. Proveer bienes y servicios de emergencia a refugiados y migrantes;

  2. Asegurar que estos disfruten de sus derechos y de protección, y reducir la incidencia de la violencia sexual basada en género, la trata y la explotación laboral; 

  3. Asegurar que sean integrados social, económica y culturalmente en comunidades empoderadas, para reducir la estigmatización, la discriminación y las reacciones xenófobas;     

  4. Mejorar la capacidad de los gobiernos de acogida para gestionar una respuesta regional coordinada.  

Para lograr los objetivos del Plan se requiere mayor apoyo de la comunidad internacional, pues aún se requieren recursos para cubrir las necesidades inmediatas identificadas para 2018. Por ello, es indispensable fortalecer el apoyo internacional a los países de acogida, para que las personas más vulnerables en este momento tan crítico y difícil de sus vidas puedan salir adelante.




ACTIVATE: El Movimiento Global Citizen es una serie documental de seis partes de National Geographic y Procter & Gamble, coproducida por Global Citizen y RadicalMedia. ACTIVATE crea conciencia sobre temas de pobreza extrema, desigualdad y sostenibilidad para movilizar a los ciudadanos del mundo a tomar medidas e impulsar un cambio significativo y duradero. La serie se estrenó a nivel mundial en el otoño de 2019 en National Geographic en 172 países y 43 idiomas. Más información aqui.

Editorial

Combate la pobreza

280,000 venezolanos solicitaron el status de refugiado en Perú. Esta es la tarea de esta trabajadora de ACNUR para ayudarlos.

Por Erica Sánchez