El año pasado se esperaba que más personas que nunca votaran en el mundo, tomando en cuenta que hay aproximadamente 2 mil millones de votantes en 50 países que pueden ir a las urnas a elegir a sus líderes. Ejercer el derecho al voto, para la gente, es una manera de exigir responsabilidad a sus gobiernos y de tomar una postura en relación a ciertas políticas.
Desde finales de la Segunda Guerra Mundial, este derecho se ha extendido a más personas en el mundo. En 1946, las democracias conformaban menos del 30% de los países del planeta. Actualmente, más de la mitad de los gobiernos son democráticos.
Sin embargo, el término “democracias” es amplio y abarca un sinnúmero de gobiernos diferentes, cada uno con sus propias reglas y restricciones sobre quién exactamente tiene el derecho de votar.
A continuación presentamos una mirada sobre el aspecto que presenta el derecho al voto y las políticas electorales en el mundo.
India: el voto más numeroso del mundo, pero aún no para todos
An Indian Muslim woman displays indelible ink mark on her finger after her casting at a polling station, Bengali Tola Inter college in Varanasi, India, May 19, 2019.
An Indian Muslim woman displays indelible ink mark on her finger after her casting at a polling station, Bengali Tola Inter college in Varanasi, India, May 19, 2019.
Con 800 millones de votantes elegibles, India está categorizada como la democracia más grande del mundo. Sin embargo, para la minoría musulmana del país, no siempre es así.
En diciembre de 2019, congresistas indios aprobaron la Ley de Enmienda de Ciudadanía para modificar la ley de ciudadanía del país, que prohibía a los migrantes que entraban al país sin documentación obtener la ciudadanía india. La nueva ley concedió a muchos ciudadanos de Afganistán, Pakistán y Bangladesh la oportunidad de aplicar para la ciudadanía, pero solo si eran hinduistas, cristianos, sijs, jianistas, parsis o budistas.
La ley deja fuera a los musulmanes, el grupo minoritario más grande de India y la minoría religiosa que ha sido perseguida en los países vecinos, quizá de manera más notable en Myanmar, donde los musulmanes rohingyas enfrentan un “ejemplo de manual de limpieza étnica”, según Naciones Unidas.
A los musulmanes que son ciudadanos indios también se les ha negado sus derechos al voto. Missing Voters estimó que aproximadamente 120 millones de ciudadanos no estaban en las listas de votación en las elecciones nacionales de 2019, más de la mitad de los cuales eran musulmanes o de la casta más baja dalit. Las mujeres también resultaron afectadas de forma desproporcionada.
Austria: la primera nación europea que permite votar a los 16 años
17 year-old Philippa Baminger casts her vote for the national elections in Austria at a polling station in Vienna, on Sept. 28, 2008.
17 year-old Philippa Baminger casts her vote for the national elections in Austria at a polling station in Vienna, on Sept. 28, 2008.
Brasil y Nicaragua bajaron la edad legal para votar a 16 años en la década de los ochenta. Sin embargo, Austria se convirtió hace poco en el primer país de la Unión Europea en seguir su ejemplo. En 2007, los austriacos ganaron el derecho a votar a la edad de 16 años, una decisión que incrementó a 200,000 la base de votantes del país, según The Independent.
La medida fue concebida para contrarrestar la población del país que envejece rápidamente y también para alentar a los austriacos a que participen en política a una etapa más temprana de la vida. Los críticos, sin embargo, alertan que los jóvenes de 16 o 17 años no han madurado lo suficiente para tomar decisiones políticamente informadas y ponderadas.
A pesar de la controversia, la decisión austriaca ha conducido a que otros países consideren hacer también el cambio. Malta se convirtió en el segundo estado europeo en otorgar el derecho al voto a los jóvenes de 16 años en 2018. Y en el Reino Unido, Escocia y Gales ha bajado la edad para votar a 16 años.
Arabia Saudita: el país que otorgó recientemente el sufragio a los mujeres
A Saudi woman casts her ballot at a polling center during municipal elections in Riyadh, Saudi Arabia, Dec. 12, 2015.
A Saudi woman casts her ballot at a polling center during municipal elections in Riyadh, Saudi Arabia, Dec. 12, 2015.
En 2015, las mujeres saudí obtuvieron el derecho al voto y a postularse como candidatas. En sus primeras elecciones, aproximadamente 130,000 mujeres se registraron para votar y un total de 978 mujeres se registraron como candidatas, según BBC News. Aunque esto aún constituye un marcado contraste con los 1.35 millones de votantes hombres registrados y los 5,938 hombres registrados como candidatos ese año, las elecciones de 2015 fueron un suceso importante que marcó el progreso de los derechos de las mujeres en el país.
Desde entonces, las mujeres en Arabia Saudita han ido poco a poco acumulando éxitos y ampliando sus derechos. En 2016, cerca de 15,000 mujeres firmaron una petición demandando el fin del sistema masculino de custodia del país. Dos años más tarde, las mujeres ganaron el derecho a conducir y un año después se les permitió obtener un pasaporte y viajar al extranjero sin el permiso de un pariente hombre.
Sin embargo, las normas de custodia continúan gobernando muchos de los aspectos de la vida de una mujer, creando restricciones en cuestiones como el matrimonio, salir de prisión y hasta irse de un refugio para victimas de abuso.
Bolivia: donde no votar puede resultar en la suspensión del salario
A woman signs on a voters record after voting at a polling station during general elections in La Paz outskirts, Bolivia, Oct. 20, 2019.
A woman signs on a voters record after voting at a polling station during general elections in La Paz outskirts, Bolivia, Oct. 20, 2019.
Como muchos otros países latinoamericanos, Bolivia tiene una política de votación obligatoria. El país introdujo esta ley en 1952, la cual obliga a todos los ciudadanos a emitir su voto.
Aunque el voto obligatorio está presente en 27 países en el mundo, no siempre es impuesto. En Bolivia, sin embargo, la abstinencia al voto puede resultar en una multa y hasta en la suspensión del salario si el ciudadano no comprueba haber votado antes de que transcurran tres meses a partir de la fecha de elecciones. El gobierno puede monitorearlo porque los votantes reciben una tarjeta después de emitir su voto como prueba de su participación.
Defensores del voto obligatorio argumentan que los gobiernos democráticos son más legítimos cuando proporciones de población elevados participan y que el voto, sea voluntario o no, ayuda a crear una ciudadanía más educada. El argumento principal contra el voto obligatorio es que éste contradice la idea de libertad asociada con la democracia.
Burkina Faso: la nueva democracia del mundo
Voters queue before casting their ballots, during elections in Ouagadougou, Burkina Faso, Nov. 29, 2015.
Voters queue before casting their ballots, during elections in Ouagadougou, Burkina Faso, Nov. 29, 2015.
Después de casi tres décadas ininterrumpidas de mandato semiautoritario por parte del expresidente Blaise Compaore, Burkina Faso comenzó su transición democrática con sus primeras elecciones libres y justas en noviembre de 2015, lo cual hace que el país sea una de las democracias más jóvenes del mundo en la actualidad.
Sin embargo, la nación no ha tenido un comienzo fácil. Justo después de las primeras elecciones, el país sufrió un ataque terrorista sin precedentes. Después de superar la devastación inicial, el gobierno se enfocó en reforzar la seguridad nacional y no ha abordado totalmente los problemas de pobreza y hambre en la nación.
Los derechos de las mujeres son otro de los asuntos clave. Aunque la equidad de genero está legalmente protegida, en la práctica, la mutilación genital femenina, el matrimonio forzado y a temprana edad y la violencia doméstica se practican ampliamente, según Amnistía Internacional. Actualmente existe una falta de representación femenina en el parlamento y en los partidos políticos del país, pero hay esperanza: las mujeres jóvenes se involucran cada vez más en la política.
Estados Unidos: una democracia con un sistema viciado
A voter marks a ballot for the New Hampshire primary inside a voting booth at a polling place, Feb. 9, 2016, in Manchester, N.H.
A voter marks a ballot for the New Hampshire primary inside a voting booth at a polling place, Feb. 9, 2016, in Manchester, N.H.
Aunque conocido a nivel internacional por sus ideales democráticos, Estados Unidos continúa luchando con la equidad cuando se trata del derecho al voto. Los afrodescendientes, nativos norteamericanos y otros grupos históricamente marginados siguen enfrentando opresión como votantes a pesar de décadas de activismo y diversos avances.
La Ley de los Derechos al Voto de 1965 fue una decisión histórica que amplió los derechos al voto de las personas de color y de las mujeres, pero los estados continúan suprimiendo los votos de los afrodescendientes a través de impuestos sobre el voto, pruebas de alfabetismo y violencia directa. Tácticas similares se han utilizado para suprimir los votos de otras comunidades poco representadas.
En 2013, la supresión del voto alcanzó un punto crítico como resultado de la decisión de Shelby County v. Holder de la Suprema Corte, que echó abajo la cláusula de autorización previa de la Ley de los Derechos al Voto, que exigía la aprobación federal para hacer cambios en las leyes electorales a nivel local. Desde entonces, más de 25 estados han promulgado restricciones para ejercer el voto, incluyendo leyes de identificación para los nuevos votantes, restricciones de registro y purgas de votantes que han dificultado más el ejercicio del derecho básico al voto para las poblaciones marginadas.
En la actualidad el congreso considera aprobar la Voting Rights Advancement Act, una propuesta de ley con apoyo bipartidista que restituiría la enmienda original y cuyos defensores afirman que catapultaría a Estados Unidos hacia una democracia más inclusiva.
Global Citizen y HeadCount se han unido para lanzar la campaña Just Vote, la cual moviliza a los jóvenes norteamericanos a registrarse para votar antes de las elecciones de 2020, y en el futuro. Como parte de la campaña. tus artistas favoritos ofrecen experiencias exclusivas, premios y merchandising — y estarán disponibles una vez que los votantes consulten su estado n el registro de votantes. Para saber más acerca de la campaña Just Vote y cómo puedes tomar acción, haz click aquí.
Traducción: Adam Critchley