Científicos de la Universidad de Georgia (UGA) advirtieron en un estudio reciente que alrededor de 111 millones de toneladas métricas de desechos de plástico serán desplazadas por las nuevas políticas chinas de prohibición de importación de los desechos plásticos globales.
Durante años China absorbió y procesó gran parte de los plásticos recicladosy otros materiales del mundo. Antes de que esta nueva política entre en vigor el 1 de enero, EE. UU. enviaba diariamente a China 4.000 contenedores de materiales reciclables.
Desde 1992, China ha importado el 45% de los residuos plásticos del mundo, según el estudio, titulado "La prohibición de las importaciones chinas y su impacto en el comercio mundial de residuos plásticos". Ya que China no aceptará esos residuos, ahora los países de altos ingresos, como Estados Unidos y muchas naciones europeas deben encontrar nuevas formas de lidiar con sus residuos plásticos.
Los países de altos ingresos exportaron el 70% de los desechos plásticos del mundo en 2016. Pero como han dependido en gran medida de China para procesar los desechos plásticos, estos países no están preparados para la creciente cantidad de residuos plásticos que se acumulan en sus países, según afirman los científicos.
El estudio sugiere que los países del este de Asia oriental podrían recibir importaciones de algunos de los residuos, pero advierte que carecen de la infraestructura para gestionar incluso sus propios desechos plásticos.
"Sin nuevas ideas audaces y cambios en todo el sistema, incluso las relativamente bajas tasas actuales de reciclaje ya no se cumplirán, y nuestros materiales reciclados anteriormente podrían terminar en vertederos", explicó Jenna Jambeck, coautora del estudio publicado en el blog de investigación de la Universidad de Georgia.
Algunos, sin embargo, creen que esta nueva política de China parte de una iniciativa más grande llamada "Cerco verde" que apunta a fomentar mejores hábitos de reciclaje a nivel mundial a través de la reducción de los envíos de materiales que están demasiado contaminados para ser reciclados y deban terminar en vertederos.
Leon Farahnik, CEO de CarbonLITE, una planta de reprocesamiento de botellas de plástico, cree que esta nueva medida forzará la adopción de mejores prácticas de reciclaje en los EE. UU.
CarbonLITE se beneficia de operar en uno de los 11 estados que han adoptado leyes de depósito de contenedores que han aumentado las tasas de reciclaje de plástico en un 28%.
El estudio también destaca un problema importante que los países pueden ahora enfrentar: "desechos plásticos, recortes y chatarra".
Antes de la prohibición, estos eran los tipos de plástico más comúnmente exportados. Estos plásticos de un solo uso no tienen un método estandarizado de producción y, por lo tanto, son el tipo de desechos que los países no pueden reciclar.
Para evitar un aumento de los plásticos no reciclables que necesitarán un "hogar", el estudio dice que los países necesitarán aumentar sus compromisos para reducir la producción de plástico y aumentar el reciclaje.
A medida que los países en desarrollo comiencen a implementar soluciones más ecológicas para proteger a sus países del daño ambiental, "nuevas ideas audaces y estrategias de gestión" serán clave para mantenerse al día con los desechos plásticos del mundo, dicen los científicos.
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